Enseñar a bailar es ayudar a perfeccionar la escultura del alumno y que éste descubra y vibre con todas las emociones que existen dentro de él.
Mover el cuerpo al compás de la música no solo es una forma de expresión e interacción social, también es un motor que te levanta el ánimo y te impulsa a estar bien de salud, lo mejor de todo es que bailar es apto para todas las edades.